El ATP (Adenosín Trifosfato o Trifosfato de adenosina) es una molécula orgánica del tipo nucleótido esencial para la energía celular.
Se produce tanto en la fotorrespiración vegetal como en la respiración celular de los animales en unos orgánulos llamados mitocondrias, y es la principal fuente de energía para la mayoría de los procesos y funciones celulares conocidas.
El ATP es, por tanto, la molécula portadora de la energía primaria para todas las formas de vida (bacterias, levaduras, mohos, algas, vegetales, células animales).
Importancia del ATP
La síntesis de ATP, molécula descubierta en 1929 por el bioquímico alemán Karl Lohmann en Alemania y al mismo tiempo, Cyrus H. Fiske y Yellapragada Subbarao en Estados Unidos, ocurre principalmente en las mitocondrias mediante procesos de fosforilación oxidativa, utilizando la energía liberada durante la oxidación de nutrientes.
El ATP almacena y libera energía para impulsar diversas funciones celulares, como el transporte de energía y la activación de moléculas. Aunque son muy diversas las biomoléculas que contienen energía almacenada en sus enlaces, es el ATP la molécula que interviene en todas las transacciones de energía que se llevan a cabo en las células; por ella se la califica como «moneda universal de energía».
El ATP es crucial para la salud celular y sistémica. Problemas en su producción pueden contribuir a trastornos y enfermedades.
Evidencia de Biow en la generación de ATP
Biow incrementa la producción de energía (ATP) a nivel celular.
Así lo ha demostrado en varios estudios, uno de ellos sobre el rendimiento deportivo de un equipo de fútbol. Se observó el efecto de Biow en la capacidad mitocondrial y síntesis de proteínas en jugadores de fútbol del Villarreal FC y se encontraron datos relevantes sobre la expresión de complejos mitocondriales y su relación con la producción de ATP, fundamental para el rendimiento celular.
La producción de ATP es vital para la energía celular. Y con Biow se observó un aumento en la concentración de ATP después de los partidos en la mayoría de los casos.
En definitiva, las mitocondrias de las células de los jugadores del Villareal expuestos a Biow, creaban más energía y, por tanto, mejoraban su rendimiento celular, lo cual se traduce a su vez en una mejora de su rendimiento deportivo.
Más evidencia científica
En un estudio murino llevado a cabo por el Grupo de Respuesta Celular al Estrés Oxidativo de la Universidad de Oviedo y Biow, se encontró un aumento significativo de la producción de ATP en el cerebro de los ratones envejecidos, lo que puede ser crucial para protegerse contra enfermedades neurodegenerativas. En el músculo de ratones ancianos, Biow demostró incrementar significativamente la capacidad energética. Además, el valor de este estudio no sólo es el incremento del ATP en ratones ancianos, sino que tenían más ATP que los jóvenes no expuestos a Biow.
Además, al aumentar la producción de ATP en el cerebro y mejorar la capacidad energética en el músculo, Biow contribuye a proporcionar la energía necesaria para procesos metabólicos implicados en la regeneración celular y en la reparación de tejidos dañados.
Otro estudio hecho también ratones por el mismo equipo de investigación y cuyos resultados se publicaron en el 2022, también demostró el aumento del rendimiento celular y el ATP en modelos murinos envejecidos expuestos a Biow.